La dirección del oleaje viene dado por la dirección predominante de vientos que originaron esas ondas en alta mar. La dirección del oleaje en el norte de España es muy importante para saber en qué playa puede haber mejores olas. Como en nuestro caso en las playas de Cantabria.
Como hemos comentado en otras entradas la calidad del oleaje viene dado por la consistencia continuada de los vientos durante un amplio período de tiempo y con una misma dirección bien definida a ser posible. Se trata de que un soplido sea largo ,con la misma intensidad y con la misma dirección durante el mayor tiempo posible. Eso hará que se formen ondas bien alineadas desplazándose en una misma dirección.
Si el espacio que recorren esas ondas es de miles de kilómetros mejor. Así se podrán ir agrupando y formando los trenes de oleaje y por tanto aumentando la calidad de las mismas. Nosotros viendo ese espectáculo desde tierra, veremos unas ondas que viajan separadas entre sí por la misma cantidad de tiempo y paralelas. Eso es la forma que tiene un oleaje de calidad visto desde las costas dónde van a chocar, romper, ser surfeadas y morir.
Dirección del oleaje
Si durante ese camino, de miles de km las ondas no han sido atacadas por otros vientos fuertes en direcciones diferentes a la original, tendremos un mar de calidad con una dirección estable. Por desgracia no suele ser lo más habitual ya que como en cualquier largo viaje raro es que no se cruce alguna de las variables. Aunque sin duda es posible que ocurra y muchas veces nos llega oleaje de calidad.
En función de la dirección del oleaje y de la dirección de las playas, se toma la decisión de escoger una u otra para acertar en el baño. Como ya hemos explicado influyen otras muchas variables para acertar…y la dirección del mar respecto a la playa es una de ellas).
En el mar cantábrico la dirección del oleaje más favorable y la más predominante es la que viene del NW (noroeste). Otras posibles son dirección del W (oeste), N (norte), NE (nordeste). El mar que viene del N suele dejar oleaje con olas demasiado juntas entre sí (período bajo) porque no han tenido distancia suficiente para agruparse.
Peor aún en el caso del mar del NE, con menos distancia de viaje (como mucho desde Francia). En el caso del W la cosa cambia porque si puede ser un mar de calidad dada la inmensidad del océano Atlántico y el largo viaje a recorrer pero el problema es que se pasa de largo en la mayoría de las playas, ya que hay pocas playas expuestas al W en la costa cantábrica, y acaban en la costa francesa en buena medida.
Dirección y orientación
Así que ya veis que un factor importante para tener un buen baño es tener en cuenta la dirección del oleaje y la dirección a la que se expone la playa. El problema es que como hemos dicho influyen otros factores también muy importantes que hay que controlar para finalmente poder surfear unas buenas olas.
Aquí y en las clases de surf personalizadas para niveles de perfeccionamiento las explicamos para ayudaros a entender el complejo mundo de las olas.
Si quieres echarle un ojo a la dirección del viento y del mar en tu zona, no dejes de visitar nuestra herramienta favorita Windgurú, en una entrada próxima os enseñaremos a «leer» esta herramienta.
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